Vivir la naturaleza es una necesidad cada vez más apremiante para el ser humano. El contacto con el campo, el aire fresco, la atmósfera limpia, el sol cálido, es algo por desgracia, poco habitual en los tiempos que corren. Disfrutar de todas estas maravillas, en convivencia continua con un animal tan estupendo como el caballo, es una experiencia única. Estamos seguros que inolvidable. Disfrutar de la naturaleza en Andalucía no tiene precio.
Los más de 600 Km. de senderos conectan con pequeñas aldeas y pueblos blancos, estos viejos caminos ofrecen un recorrido agradable a través de paisajes incomparables. Exuberantes valles secretos en otros tiempos utilizados por bandoleros, bosques de castaños poblados de helechos y extensas dehesas de encinas y alcornoques.
No es una sierra muy alta, aunque algunas cotas alcanzan los 1000 m. La altitud media es de 600 m. Suaves colinas para cabalgar, desde donde los sitios más altos divisamos otras colinas coronadas por castillos templarios y mezquitas árabes del siglo X.
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